Para los abuelos, los nietos son lo más importante y para los nietos, los abuelos son sus héroes. Esa es la historia de Yeison David Parra y Luis Alfonso, un abuelo que no puede ocultar su felicidad al verlo por primera vez en el Festival de Festivales.
Foto: Diego Vega
Por: Diego Vega
“Vamos Yeison, vamos a cobrar. Estállelo”, se escucha entre la música del Festival de Festivales. Se lanza el tejo y pega cerca del bocín. La alegría se sentía en su mirada, en cada aliento, en cada palabra. Hizo una videollamada por whatsapp y le dijo a la pantalla, “vea al campeón” y enfocó con su celular a su mayor orgullo, Yeison David Parra. La felicidad era evidente, Luis Alfonso Puerta pudo estar presente en el campeonato de su nieto en el Babytejo, tal como lo hizo el año pasado su mamita.
Aquel tejo que estaba dentro de la arcilla era un regalo de su abuelo. Desde pequeño siempre le había pedido un tejo y cuando lo consiguió lo escondió, sabía que se lo tenía que dar en el mejor momento como recompensa de su esfuerzo y dedicación. Fue cuando ganó un torneo de duplas en Dabeiba que le entregó el regalo y a partir de ahí, se volvió su amuleto, su herramienta más preciada.
Último lance de Yeison y felicidad absoluta al ganar el punto final y al ver detrás de la arcilla a su abuelo, a quien recuerda viéndolo jugar a los 3- 4 años, donde nació su amor al deporte colombiano. Lo que no sabía, es que ese amor fue heredado, siempre estuvo en él desde los primeros momentos de su vida. Luis cuenta que cuando iba a jugar, se lo cargaba a la cancha. Sin saber caminar muy bien, su nieto escuchó su primera mecha y agarró su primer tejo, el más pequeño, y lo tiró. Desde ahí, ya todo es historia.
La potencia de su tiro y el gusto que mostraba al tirarlo impresionó a Luis, el talento era evidente y mientras crecía y lo acompañaba a los partidos, más se involucraba en el deporte, cogiéndole el ritmo al peso del tejo y disfrutando de cada lanzamiento desde la mitad de la cancha profesional. Por medio de él, otros niños se fueron involucrando con la arcilla y el metal del deporte que más se practica en Dabeiba y el más premiado del municipio.
Yeison sabe que la concentración y el equilibrio son importantes para lograr un buen tiro y que si enfrenta lanzamientos fallidos requiere fortaleza mental. Por eso, le gustaría ser licenciado en deportes para trasmitir a los niños y niñas las enseñanzas y lecciones que ha heredado de la disciplina que practica. Mientras tanto, disfruta y aprende de cada competencia del Babytejo, soñando con crecer hasta el momento en el que tenga que cambiar de tejo y darle las gracias a su amuleto poniéndolo “de adorno donde están todos mis trofeos y medallas”.
