En el BMX la concentración y la estrategia es fundamental a la hora de enfrentar cada manga. María Ángel, en el Festival de Festivales, utiliza un método muy particular antes de subir a la rampla de salida: leer la biblia.
Foto: Juan Manuel Yepes
Por: Diego Vega
Sentada en el suelo, resguardándose del sol espera a que hagan el llamado para la siguiente ronda. Un libro que tiene en sus manos destaca en un lugar, como el Festival de Festivales, donde los gritos de diversión, el sonido de las ciclas y los gritos de padres y entrenadores son el paisaje sonoro más común. María Ángel Murillo pasa las hojas, se concentra en sus ilustraciones y con sus dedos va siguiendo la lectura que lleva su mente. Aquel libro es la Biblia, su lectura favorita y que le da seguridad, serenidad y la hace sentir mejor cuando está nerviosa.
David, Goliat y Sansón fueron los personajes que le dieron seguridad y confianza para competir ya que en la primera manga no se sentía bien porque no alcanzó a leer. Cierra el libro y lo guarda en su maleta, se sube en su cicla para calentar sus piernas e inicia a enfocarse en la siguiente carrera. Su abuela le habla, la tranquiliza y la aconseja. Coge su cicla y se dirige a la rampla a esperar su turno para correr.
María Ángel es de Urabá, sabía que su pasión era montar cicla y fue cuando su mamá la llevó a que viera todos los deportes y allí se encantó del BMX, vio que era algo extremo y eso lo sintió en el alma. Empezó practicando con una bicicleta de canasta y cuando sus abuelos vieron el nivel que tenía sobre las 2 ruedas, decidieron comprarle una de bicicrós.
Entrena en una pista de arena en Apartadó, no es la más óptima para los deportistas, pero cuando viajan a otras ciudades se llevan buenas sensaciones. Sabe que este deporte es de estrategia, que debe analizar como agarrar los peraltes, que debe ser inteligente al intentar rebasar a sus compañeros si no puede llegar a caerse. Aunque eso no es un problema para ella, no le importa caerse y sabe que si alguien más lo hace, sus buenos reflejos ayudarán para esquivar o simplemente frenar.
Ya en la rampa de largada, se acomoda en su cicla blanca, se termina de acomodar el casco y se prepara para salir. Inicia a mover sus piernas con la fortaleza de Sansón y así como David, derrotó la gigante pista del Babybmx que estaba sobre sus ojos. María Ángel sueña con seguir compitiendo y lograr superarse cada vez más, hasta llegar a un Mundial. Además, le gustaría tener un equipo de BMX para ayudar a los niños de Apartadó que van iniciando en el deporte. Quiere influenciar a los niños del futuro y enseñarles todo lo que ha aprendido junto a su cicla.
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