Foto: Juan Andrés Vásquez
Por: Diego Vega
Salió al tatami a competir la final del Festival de Festivales. Saludó a los jueces, a su oponente y realizó un poderoso grito para iniciar sus movimientos. Concentración, fuerza, agilidad y confianza se le notaron en cada movimiento. Al finalizar saludó a los jueces y al sonido del silbato, todas las banderas rojas se elevan. Emilia Osorio ganó la medalla de oro en kata y su cara de enojo y fortaleza que emitía en cada movimiento, cambió por una sonrisa tímida en el Babykarate.
Su hermano, Matías Osorio quien la veía desde la tribuna, bajó para felicitarla y con el cariño más puro de una hermandad, la abrazó con el corazón. “Es todo en mi vida”, comenta cuando se refiriere a su hermana. Sabe que ella es una de las razones por las que le gusta ganar los combates, porque cuando gana, es la primera que lo abraza con fuerza.
Emilia tiene 7 años y desde su primer año de vida vio como su hermano con disciplina entrenaba y combatía en campeonatos. Ella inició en el karate hace 2 años porque quería estar con él, entrenar y escucharlo para aprender. Matías, quien tiene 11 años y desde hace 6 entrena, comentó que le hace muy feliz ser un referente para su hermana, por eso siempre intenta enseñarle. En ocasiones, su casa es testigo de las enseñanzas que le imparte en cómo hacer las katas, como mejorar los movimientos, como estar más concentrada. Lo más importante, es que le dice que disfrute mucho lo que hace y sea feliz, que así podrá fluir mejor.
Para Matías hacer katas es su método de relajación. Antes de ingresar al tatami cierra los ojos e imagina que está en su cuarto, se visualiza tranquilo y con la medalla en su cuello. Así logra tranquilizarse y entrar con fuerza a competir. Se enfoca en él, como si estuviera solo en el coliseo, no ve a su compañero, lo ignora y hace sus movimientos con destreza. Así ha logrado ganar campeonatos importantes en Medellín y llegar a ser campeón Nacional en el 2024.
A Emilia el karate le ha ayudado a ser una mejor compañera y a mejorar como persona. Cuando se siente nerviosa recuerda las enseñanzas de su hermano y cierra los ojos para respirar y sentir la felicidad de la victoria. Ella sabe que Matías es lo más importante que tiene y que con su apoyo logrará llegar muy lejos, siempre de la mano.
Los hermanos Osorio buscan trabajar unidos como lo han hecho y mientras trabajan para llegar a un campeonato Mundial o a un Panamericano, disfrutan la experiencia de estar en el primer Babykarate y llevarse cada uno una medalla para su hogar. El mejor recuerdo de un Festival de Festivales.