Adriana Ladino: la risaraldense que quiere hacer historia en el fútbol sala
12 enero, 2025Con el '8', Adriana Ladino quiere hacer brillar al Municipio de Quinchía en su primera participación en el Festival de Festivales 2025.
Con el '8', Adriana Ladino quiere hacer brillar al Municipio de Quinchía en su primera participación en el Festival de Festivales 2025.
Foto: Liseth Camila Durango
Por: Liseth Camila Durango
Desde la vereda La Cumbre, en el municipio de Quinchía, Risaralda, llega Adriana Ladino Chiquito, una joven de 14 años que ha hecho del futsal su pasión y propósito. En su camiseta marcada con el número 8, representa sus sueños y a un municipio que, por primera vez, pisa las canchas del Festival de Festivales en esta disciplina.
Adriana es un talento que florece entre cafetales. Vive con su familia en la vereda La Cumbre, zona rural de Quinchía. Allí, entre cultivos de plátano, banano y café, ha forjado su carácter. En la cancha, ella es autocrítica y busca mejorar constantemente su temperamento y desempeño.
Su amor por el deporte nació en su infancia, cuando veía partidos de fútbol en la televisión, soñando con ser como las jugadoras que admiraba. Ese anhelo creciente la llevó a improvisar sus primeros toques con tarros en su casa, hasta que, a los 7 años, su madre, Maira Ladino, su mayor apoyo, le regaló su primer balón. A los 10 comenzó a entrenar y fue hace apenas 2 cuando descubrió el futsal, gracias a su participación en los Intercolegiados.
Su dedicación y esfuerzo la han llevado a recoger café para ayudarse con los gastos y continuar entrenando. Sin embargo, su comunidad, admirando su talento y pasión, también se suma a apoyar para que pueda participar en los distintos eventos a los que clasifica como el Babyfútbol Sala Gatorade. “Hay mucha gente que nos ayuda. Por ejemplo, yo puedo estar acá gracias a ellos, a las personas de la vereda y a mi mamá. Todos ayudan”, afirmó con gratitud. Y es que esta es la primera vez que Quinchía participa en el torneo organizado por la Corporación Deportiva Los Paisitas, y Adriana no solo lleva la bandera de su municipio, sino también la ilusión de toda una comunidad.
En el último partido de la fase de grupos, un golpe en el tobillo la dejó fuera de la cancha, pero desde las gradas apoya con la misma pasión de siempre y con la esperanza de estar lista para los octavos de final y que en el coliseo Tulio Ospina el grito de batalla siga resonando con orgullo: “¡Quinchía, Quinchía, Quinchía!”.