El agradecimiento es lo primordial en la vida de Joseph
10 enero, 2024El joven deportista tenía un sueño y su familia logró hacerlo realidad, por eso es que el pequeño sólo tiene palabras de gratitud
El joven deportista tenía un sueño y su familia logró hacerlo realidad, por eso es que el pequeño sólo tiene palabras de gratitud
Foto: Paulina Betancur
Por: Sebastián Arboleda
Empiezan a pasar los días en el Festival de Festivales y las historias de los soñadores siguen saliendo a la luz… la de Joseph Javier Orozco, de fútbol de salón, es una de ellas.
Tiene 10 años de edad y se encuentra en representación del club Bolívar FS. Es oriundo de Villa Nueva, un municipio de Bolívar a dos horas de Cartagena aproximadamente, donde su población es de un poco más de 21.000 habitantes. Para Javier es un honor estar en el Festival por primera vez, al igual que conocer la ciudad de Medellín, la cual el deportista cataloga como bonita y alegre.
Sin embargo, el camino no fue nada sencillo, esto debido a los grandes sacrificios que realizaron sus familiares y amigos para que el villanuevero pudiera estar en esta gran cita. El joven agradece profundamente a todas las personas que lo ayudaron en la recolección de fondos: sus padrinos Ariel y Rafael, su padre, su madre e incluso los vecinos de la comunidad de Villanueva. Realizando colectas, en empleos informales y con un poco de trabajo en el sector agrícola, es que se pudieron materializar los sueños del jugador de fútbol de salón. Joseph es consciente de todo el sacrificio y es por eso que desde el fondo de su corazón solo salen palabras y sentimientos de agradecimiento.
Pese a no contar con su familia respaldándolo presencialmente en la competición, Joseph se siente gratamente acompañado y asegura estar “como en casa”, especialmente por la compañía de su profesora y entrenadora, Mirella Del Valle. Si hablamos de agradecimiento, la profe es una de las principales personas por las cuales este talentoso jugador se siente gratificado, ya que, gracias a ella, su juego ha mejorado y lo ha podido ver reflejado dentro de la cancha, sumando mucha más confianza a la hora de tocar el balón.
Su relación con la “profe” empezó de manera tímida y penosa, confesado por él mismo, pero fue la misma entrenadora quién se encargó de meterse en el corazón del joven de 10 años, de tal manera que es considerada para él como su “segunda mamá”. Con miras a ser un jugador profesional del Junior de Barranquilla, sumado a convertirse en un consolidado arquitecto, Joseph está listo para cumplir sus sueños y dejar todo en la cancha del Parque Comfenalco de Guayabal.