Fotografía: Manuel ‘El Chino’ Quintero
Por: Jorge Andrés Zuluaga
A los cinco minutos del primer pitazo inicial del Babyfútbol femenino, en medio de una multitud en el área, el pie derecho de María Celeste González logró impactar el balón para marcar así el primer gol de la trigésimo séptima edición del Babyfútbol Colanta. “Me siento muy feliz, no solo por mí sino por todo el equipo”, cuenta la santandereana número 11 del equipo Rincón de Girón.
Tras su talento y sus logros hay muchas horas de esfuerzos y sacrificios. Celeste todos los días se levanta muy temprano a trotar para mejorar su resistencia y su rendimiento físico. Además, cuenta con un entrenador personalizado, quien le ha servido mucho para aumentar su rendimiento a tal punto de llegar a hacer parte de la Selección Infantil de Santander.
Flor Azucena Bonilla, su madre, cuenta que “desde pequeñita, de regalo quería pelotas, no muñecas ni nada de esas cosas”. Su mamá siempre ha sido su soporte durante sus trece años de edad y la acompaña en sus largos viajes desde Barrancabermeja, ciudad en donde viven, hasta Bucaramanga para entrenar con la selección y con su equipo.
En su hogar, Celeste se caracteriza por ser extrovertida. En la cancha algunos de sus goles los celebra bailando y le da ese toque de alegría a los momentos que comparte junto a sus compañeras.
El fútbol lo es todo para ella y su principal aspiración es llegar a la Selección Colombia. Sus regates, desequilibrio y velocidad, acompañados de su disciplina y determinación sin duda son la combinación perfecta para que María Celeste impregne su huella en el fútbol femenino en el país.
*Historia de vida Indeportes Antioquia.