¡Maximiliano: el antioqueño que nunca se vara!

Foto: Camilo Ramírez

Por: Sebastián Arboleda Rodríguez 

Maximiliano Vanegas, de Copacabana, tiene 10 años y ya se ha ganado un lugar destacado en el mundo del BMX. Este es su tercer año participando en el Festival de Festivales, y con cada edición se ha ido consolidando como uno de los bicicrosistas más experimentados. A lo largo de sus participaciones, le ha ido bien, pero en esta edición del Babybmx, sin duda, ha logrado su mejor desempeño, lo que lo llena de alegría y satisfacción.

Para Maximiliano, una de las mejores partes de competir en el Festival es reencontrarse con amigos, con quienes comparte risas y buenos momentos. Sin embargo, su espíritu emprendedor lo ha llevado más allá de solo practicar BMX. Durante el evento, Maximiliano estuvo vendiendo chocolates peruanos por todo el lugar, dulces que le dio la amiga de su mamá. Su capacidad de emprendimiento es admirable, ya que lo hace con un propósito claro: recaudar dinero para sus grandes sueños.

Uno de sus objetivos es conseguir la licencia para competir en los Juegos Nacionales en Armenia y mejorar su bicicleta. Para ello, necesita un $ 1.500.000 pesos. Sin embargo, como buen paisa, ya ha recogido un millón, lo que demuestra su determinación y esfuerzo.

El emprendimiento es algo que ha estado presente en su familia durante años, y Maximiliano decidió seguir el ejemplo de sus padres. Aprendió desde pequeño que, para lograr sus metas, es necesario ser proactivo y buscar sus propios recursos. Esto ha sido clave en su desarrollo no solo como ciclista, sino también como persona con visión y objetivos claros.

Maximiliano lleva 7 años practicando BMX, lo que representa más de la mitad de su vida. En todo este tiempo ha competido en Nacionales y en diversas competiciones como el Festival de Festivales, lo que ha fortalecido su pasión y dedicación por el deporte. Sus padres son su principal motor, siempre dándole el apoyo y la motivación que necesita para seguir adelante. De hecho, se siente muy agradecido por todo lo que hacen por él, tanto en el BMX como en su vida personal.

Su sueño es convertirse en bicicrosista profesional y, al mismo tiempo, ser un gran empresario. Le gustaría ser vendedor de lo que sea, pero con la meta de convertirse en un gran emprendedor. Con su perseverancia, su amor por el BMX y su mentalidad emprendedora, no cabe duda de que Maximiliano tiene un futuro prometedor por delante.