Este texto de vida fue realizado por Mateo Quintero Ríos, comunicador integrante de la Sala de Prensa del Festival de Festivales y conocido en el mundo de la trova como “El Bailador”. Apegado a su cultura, a sus raíces antioqueñas como ninguno, cuenta la historia de Paulina con su talento innato en octavillas, o trova dobleteada, como se le conoce.
Foto: Manuel ‘El Chino’ Quintero
Por: Mateo Quintero Ríos
Ella es Paulina Caicedo de trece años de edad y es una guardameta con bastante propiedad. Juega en Academia Alejo, presente en el Festival, viviendo “El Sueño de Todos” por llegar a la final. Cuando tenía ocho años comenzó toda esta historia porque el balón y la cancha le causaban gran euforia. Estando en su iniciación jugaba de delantera, pero ella cambió de rol y se convirtió en portera. Con mucha seguridad bajo del arco se planta y a pesar de los errores firmemente se levanta con la firme convicción que su esfuerzo no es trivial y le rendirá sus frutos cuando sea profesional. Pero aparte del deporte ella tiene otra faceta distinta a la que nos muestra estando de guardameta. Cuando termina el partido Y ella guarda los guantes Paulina saca a la luz su otro lado de cantante. Ella entre sus dos pasiones siempre saca tiempo a diario entrenando y ensayando con lo justo y necesario. Más allá de la rutina y de la simplicidad, cantar y ser futbolista le da gran tranquilidad. Aunque ella con sus manos, tapando en el festival ahoga en cada atajada el canto de gol rival, cuando se quita los guantes canta con amor y empeño poniendo en sus melodías una nota con sus sueños.
