Por: Mónica Ospina Gómez
Narrar en voz alta las acciones del partido se le convirtió a Sara Bibiana Marín en una costumbre. Lo hacía cuando era jugadora del equipo de Rionegro, y lo continúa haciendo ahora que es entrenadora del elenco Corregimiento Sur de Rionegro para evitar que las jugadoras se distraigan, es un método para lograr que estén concentradas y sigan las acciones del compromiso.
Sara comenzó a jugar fútbol cuando tenía 15 años con el entrenador Gerardo Londoño, al principio ella recuerda que no sobresalía por sus características en el campo, pero entrenó con constancia durante dos años y logró ser parte de seleccionados municipales en diferentes categorías.
Le hubiera gustado participar como jugadora de un evento como el Preselectivo Femenino del Festival Ponyfútbol que organiza la Corporación Deportiva Los Paisitas pero no pudo lograrlo, por lo cual ahora que es entrenadora disfruta cada compromiso al lado de sus pupilas a quienes acompaña con la voz durante los 60 minutos del juego.
De su experiencia como jugadora y entrenadora rescata que todo se puede mejorar desde que haya de por medio actitud, dedicación y acompañamiento de los entrenadores, por eso luego de finalizar su participación en el clasificatorio orientará su esfuerzo en prepararse mejor para los próximos años.