Por: Tatiana Gómez Quiceno
Fotografía por: Andrés Henao
Con unos patines recreativos de color rosado inició Leisy Johana Macea a practicar lo que considera como su mayor pasatiempo: el patinaje. Cursa sexto grado y también aprovecha su tiempo para estudiar artes y pintura. “Lecho”, seudónimo que utilizan sus amigos para llamarla, se considera una niña extrovertida y leal a quienes la rodean.
En el año 2017 fue obligada junto con su familia a desplazarse de Las Negritas, vereda en la que vivió gran parte de su infancia al casco urbano del Municipio El Bagre, y lo que para su entorno familiar fue un gran reto para Leisy se convirtió en un motivo de celebración. Ella siempre anhelo estar en un club de patinaje y en su vereda no había entrenador, sólo contaban con una placa deportiva en la que esta pequeña pasaba sus tardes patinando.
Sus amigos la describen como una gran amiga. “Leisy siempre que estoy triste me apoya, ella me hace sentir mejor”, dice Dayan Agresott. Le gustan las matemáticas, quiere ser una doctora, vive con sus abuelos paternos a quienes considera como sus padres, y aunque no están acompañándola por motivos personales, Leisy llegará a casa a compartirles su experiencia en el Festival de Festivales.