Fotografía: Donaldo Zuluaga
Por: Yuliana Suaza
Si los campeones tienen méritos, los que consiguen esa gesta en dos oportunidades son elegidos para marcar historia. El Baby Tenis de Campo tiene un doble campeón: Andrés Zapata, quien conquistó en el 2020 la presea de oro en la categoría de 10 años y, en esta edición, volvió a quedar en primer lugar en 12 años A. Este pequeño genio no tiene vara, pero sí una raqueta que conquista cada terreno que toca.
En sus primeros años de vida le costaba interactuar con sus amigos. Los genios, en ocasiones, prefieren no hablar para no revelar sus trucos. Por eso, sus padres decidieron buscar un deporte que le permitiera socializar y, sin pensarlo, le encontraron sus mejores amigos: las raquetas y las pelotas. Andrés ingresó a los cuatro años al Club El Bosque y tan solo un año después, fue campeón Nacional en la división de los 6 años. Fue el único antioqueño en conseguir un reconocimiento en dicha competencia, lo que originó ser nominado a la “Malla de Oro”, el máximo galardón del tenis paisa.
Andrés es el actual campeón del torneo nacional grado 4. Su progenitor, Marlon Zapata, se ha encargado de entrenarlo y motivarlo: “el niño, además de entrenador, necesita una cabeza que lo guíe y esa cabeza soy yo”, dice. Este padre ha sido fundamental: en los partidos: se aleja, analiza y habla poco; Andrés lo mira desde la cancha y asiente, es como si hubiesen aprendido a entenderse con gestos. El padre comprende el silencio de su niño, Andrés no habla, se concentra y se limita a golpearse las piernas para motivarse.
El deporte de la tierra batida está siendo hipnotizado por un genio de once años, el Baby Tenis de Campo lo vio hacer fantasía por primera vez hace dos años, y hoy, de nuevo, las canchas del complejo tenístico Carlos J Echavarría, fueron hechizadas por un talento innato. Andrés Zapata y su magia en el tenis.