¡Ánimos para el animador!

Foto: Melissa Gualdrón

Por: Melissa Gualdrón Cañizares

Las artes escénicas son la gran pasión de Tomás: le gusta estar en la tarima, actuar, bailar, expresarse a través de su cuerpo y su carisma. Hace parte del club Vipers de Cundinamarca y en el Festival de Babyporrismo Inder Medellín vivió una de las experiencias que más disfruta en la vida: competir.

El porrista sale de bambalinas casi exigiéndole al público aplausos, gritos y buena energía para su equipo. Mira hacia las graderías y levantando sus brazos los invita a animarlos, a envolverse en su rutina y disfrutar con ellos. “Para eso hay personas viendo, para que esto se vuelva una fiesta y todos estemos felices; mis compañeras y yo salimos a demostrar nuestras capacidades, entonces me gusta sentir que desde afuera se alegran con nuestra presentación”, comentó.

Tomás Andrés Gil Espitia tiene 10 años de edad y entrena desde los 7. Siente que la energía que le da el porrismo lo ha hecho disfrutar mucho del proceso y que cada vez tiene más ganas de aprender cosas nuevas. “Estar acá me hace feliz, me lleva a cumplir sueños y a retarme cada día. Si uno se mete en un deporte es para darla toda y eso es lo que yo hago, así consigo ser mejor y que mis compañeras también mejoren”, dijo sobre su experiencia.

En el Festival de Festivales ha podido disfrutar de su equipo, conocer nuevas personas y ver a otros competidores que le pueden aportar a su vida. Tomás se sueña en los escenarios, dejando todo de sí para el disfrute propio y el del público presente.