Por: Valentina Herrera Cardona
Desde el día de la entrega de uniformes en el Festival de Festivales, Juan José Aranzazu Arcila se destacaba entre los chicos. Era el primero en hablar del grupo y fue uno de los más alegres cuando recibió su vestimenta amarilla, que lo caracterizaría como atleta de la delegación de Inder Medellín.
De su grupo es de los más pequeños, pero eso no le impide ser un líder: alienta a sus compañeros, atiende todas las indicaciones de la profe, es el más activo de los ensayos y se ríe fuerte. Su interés por esta disciplina comenzó desde el colegio y desde ese entonces no ha parado de correr.
Conoce muy bien la pista de atletismo del estadio “Alfonso Galvis Duque”. Allí entrena desde que le dijo a su progenitora que lo inscribiera en este deporte. “Es que yo le ganaba a todos en el colegio en cada competencia y así le decía a mi mamá para que me trajera acá”.
Para él, entrenar en la pista es fortalecerse como persona. “La profe nos exige mucho en cada entrenamiento, a algunos no les gusta eso, pero a mí me parece importante. Por eso es que hoy estamos acá compitiendo”. También agrega que “el ambiente es muy bueno, me gusta mucho animarlos y compartir con ellos”.
Sus compañeros lo destacan como un buen amigo, amable y muy talentoso. “Siempre, en las prácticas nos deja tirados. Él es muy rápido”, cuenta Felipe, quien también compite para el Inder Medellín.
Juan José siempre tiene una sonrisa dibujada en su rostro. Sólo la cambia por una de concentración en cada inicio de una competencia.