La voluntad rompe cualquier barrera en el Babyoparataekwondo

Foto: Sebastián Gómez Vásquez

Por: Sebastián Gómez Vásquez

En el club de taekwondo de la Escuela Normal Superior de Jericó, se forja una historia que trasciende barreras comunicacionales. Yeison Zapata, un joven de 23 años, ha encontrado en el arte marcial no solo una pasión, sino un camino hacia la superación. Enfrentando desafíos que muchos considerarían insuperables, su historia es un testimonio emocionante de la voluntad y la disciplina.

Hace 7 años, Yeison decidió dar el salto al taekwondo, atraído por la disciplina y la fortaleza que esta práctica le ofrece. Desde entonces, ha trabajado incansablemente, no solo en su técnica marcial, sino también en la comunicación con sus compañeros. Al principio, el reto era grande, pero como dice su entrenador, Jarwin Uribe, “el proceso de comunicación entre nosotros y el resto de los integrantes del club es muy bonito”. El lenguaje de señas se convirtió en su herramienta para conectar con el mundo que lo rodea.

Yeison no solo es un taekwondoka, sino también un maestro que comparte el lenguaje de señas con los más pequeños del club. Su iniciativa ha permitido que los niños aprendan lo básico de este lenguaje, creando un ambiente inclusivo y lleno de aprendizaje. “La disposición al aprendizaje y la disciplina son fundamentales”, afirmó Yeison, destacando su compromiso con la superación personal y colectiva.

Jarwin, enfatizó la dedicación de Yeison: “Es una persona que siempre está trabajando con ganas de avanzar. La voluntad es la palabra que mejor lo define”. Juntos, han logrado construir un lazo fuerte y enriquecedor, donde el aprendizaje fluye tanto en las técnicas de taekwondo como en la comunicación. El camino no ha sido fácil, sin embargo, el apoyo de la Liga Antioqueña de Taekwondo ha sido fundamental para su club. “Tratamos de aprovechar todos estos espacios que nos brinda la Liga”, comentó Jarwin, reflejando el espíritu de equipo que caracteriza a su grupo en el Festival de Festivales 2025.