Por: José Alejandro Calderón
Katherine Palacios viene desde el municipio de Turbo, tiene 9 años, práctica bicicrós hace algo más de dos años y en este 2017 participa en la primera versión del Festival de BMX organizado por la Corporación Deportiva Los Paisitas.
La llegada de Katherine a este vertiginoso deporte no fue sencilla. En un principio su madre se oponía a que lo practicara, pero el hecho de ayudar a su padre a arreglar la bicicleta y verlo correr desde muy pequeña, lo hizo una tarea imposible. El temor venía de las experiencias vividas por Arnoldo Palacios, su papá, también bicicrosista, que en ocasiones llegaba adolorido, raspado y hasta fracturado, después de algún entrenamiento o carrera. Su primer caballito de aluminio vino como un regalo del Niño Dios.
El simple hecho de aprender a sostenerse por sí misma en la bicicleta no fue fácil, fueron muchas las caídas. Utilizaba unas rueditas de apoyo hasta que su padre decidió quitárselas. Él la sostuvo del sillín, ella avanzó y después él la soltó, así fueron sus primeras pedalazos; pero cuando ella se enteró de que él ya la no la sostenía se cayó. Desde ese momento los tropiezos fueron muchos menos y la mano firme que la sostenía del sillín pasó a ser el apoyo y el conocimiento de un entrenador.
En apenas dos años y medio Katherin ha tenido un avance sobresaliente: varias medallas de oro, plata y bronce en Departamentales Escolares y un subcampeonato nacional. Está acostumbrada a entrenar y competir con intensidad. Su padre y entrenador, Arnoldo Palacios, añade que además del esfuerzo su talento la ha impulsado a crecer como deportista: “ella viéndome correr desde pequeñita y todo eso, como que lo llevaba por dentro, solo hubo que meterla a la pista, lo hace innato.”
“Yo siento como si estuviera en las nubes, doy todo lo que tengo para quedar en el primer puesto”, eso dice ella cuando se le pregunta sobre lo que siente cuando baja por el partidor y sale hacía la pista. Su deseo es dar lo mejor de sí misma y alcanzar el primer lugar en el Festival de BMX: “mi papá me tiene enseñada a entrenar y correr duro… Me ha traído hasta aquí, para correr y ganar esta competencia”, concluye ella.