Foto Sebastián Arboleda Rodríguez
Por Sebastián Arboleda Rodríguez
Tomás Alejandro Laverde es un voleibolista de 10 años que pertenece al club Benjamín de Medellín, pero representa a El Carmen de Viboral en el Babyvoleibol Comfama y está listo para mostrar su tenacidad dentro del campo de juego. Su lugar de nacimiento es Bogotá, aunque lleva casi un año viviendo en la ciudad de la “eterna primavera” y desde que llegó solo se ha dedicado a practicar este deporte.
Inició su carrera deportiva gracias a su padre, que le recomendó empezar en el voleibol, además lo motivó para que mantuviera el impulso durante todo su proceso. Tomás siente que su papá es un apoyo muy especial, incluso cuenta que su mayor sueño es “ser profesional y ganar mucha plata para comprarle un carro a mi papá y una casa a mi hermana”, mostrando que es un niño que pone a su familia por delante. Alejandro pertenece a una familia plagada de deportistas. De hecho, su hermanita Juanita también se encuentra disputando el Festival de Festivales en el Babypatinaje.
Tomás se siente cómodo viviendo en Medellín, resaltando que es muy chévere estar en esta ciudad. Fue recomendado a El Carmen de Viboral en diciembre para disputar el festival, pero al término de la competencia su idea es seguir trabajando en su club habitual y poder lograr grandes cosas para hacerse un nombre importante dentro de los clubes de voleibol de la ciudad.
Tomás no se nubla ante la derrota, su equipo no ha tenido la mejor presentación en el torneo, pero él se mantiene positivo y con la mentalidad de siempre mejorar en comparación al partido pasado. Además de su motivación personal, siempre trata de animar a sus compañeros y les dice que mantengan la calma, sosteniendo que nunca se rindan y que hay luchar cada partido con ganas, espíritu y corazón.