Por: José Alejandro Calderón
Ana Sofía Quintero tiene 10 años, nació en Medellín y práctica ajedrez desde los cinco, cuando su papá le enseño como mover las fichas. Ahora le gana las partidas a su padre con facilidad, entrena cuatro veces por semana y se consolida como una deportista destacada a pesar de su corta edad.
Cuando está frente al tablero Ana Sofía se concentra únicamente en la partida, la situación de sus piezas, las de su rival y la mejor manera atacarlo y contrarrestarlo. “Primero veo las piezas de él y que me está atacando, pienso como defenderme de la mejor forma, veo los errores que comete y gano piezas”, cuenta ella. Añade que lo que más disfruta del juego es analizar a su oponente y generar su propio plan de juego. Después de cada partida importante se sienta al lado de su profesor para analizar el juego meticulosamente, movimiento por movimiento.
Faiber Lotero, su entrenador, la describe como una ajedrecista con muchas condiciones: “Es una niña muy sólida, comete muy pocos errores, es muy concentrada, siempre está pendiente del tablero… Aprovecha el primer error que cometa el rival.”
En poco más de una año Ana Sofía ha participado en varias competencias importantes como nacionales y departamentales escolares y el Campeonato Centroamericano y del Caribe Juvenil, realizado en Venezuela en 2016. Incluso participó en un torneo en su colegio, en el que estuvieron estudiantes de bachillerato, donde le ganó a todos.
Su pieza favorita es la dama: “Me gusta mucho porque tiene movimientos para prácticamente todas partes y es la pieza más poderosa del tablero.” Así como su ficha preferida es la más dominante sobre la mesa de ajedrez, Ana Sofía se perfila como una de las favoritas para ganar el primer Festival de esta disciplina.