Foto: Juan Manuel Yepes
Por: Camilo Zuluaga Builes Vélez
“Las competencias y conocer gente nueva fue lo que me atrajo a los bolos”, dijo Jonathan Sánchez Ocampo, quien en solo 2 años de formación ha logrado participar en 2 Festival de Festivales, exactamente en el Babybowling. Su progreso en la pista se ha reflejado en la mejora de su posición de llegada y la precisión de su tiro, habilidades que ha pulido bajo la guía de su profesora Luisa Álvarez, a quien le agradece todo lo enseñado.
Sin embargo, la disciplina a la que más tiempo y dedicación a puesto el pequeño fanático de Dragon Ball es a los clavados, deporte que ejerce desde hace 9 años. Fue en ese entonces que visitó la Villa Olímpica, de Pereira, lugar que suscitó interés del joven hacia los clavados, practicando de martes a viernes.
“Los clavados me gustan más porque están en los Juegos Olímpicos”, reconociendo que aunque disfruta mucho de los bolos más allá de las medallas, el verdadero gusto hacia ambos deportes son las amistades forjadas con los deportistas y los viajes.
Con el sueño de viajar por el mundo a través del deporte, Jonathan muestra que las amistades son razón suficiente para ser un gran deportista.