Por: Jessica Cano Rojas
Fotografía por: Andrés Henao
“En Támesis se practica rapel y torrentismo, hay mucho turismo, la gente visita las cascadas de San Antonio, de dónde sacan el agua. A mí me gusta vivir ahí porque puedo salir cuando quiera, es un lugar seguro, no como en la ciudad que hay que estar encerrado”, dice José David Escobar Ceballos, jugador de Inder Envigado… sí, Envigado y no Támesis.
José, junto con otros dos compañeros del respetivo municipio del Suroeste, vino a completar el equipo de Envigado. Cuenta Santiago Quimbayo Patiño, tamesino también y entrenador de Thunder (equipo femenino de voleibol), que conoció a José desde el 2016 viéndolo jugar con el equipo de Támesis y desde entonces le ha seguido el rastro, y fue él quien al saber que a Inder Envigado le faltaban algunos jugadores, recomendó a José para que pudiera participar en el Festival, ya que con el equipo de Támesis no se había podido. Y es que como en muchos lugares de Antioquia, deportes diferentes al fútbol no cuentan con el apoyo suficiente para salir participar a otros lugares. Sin embargo, deportistas talentosos logran llegar por otros medios y representar a sus municipios.
Gracias al voleibol y a su talento, José ha podido conocer diferentes lugares, participado en Escolares, Intercolegiados y hasta Departamentales (con doce años lo convocan con la categoría Sub 21 y lo ponen de titular) ha visitado Valparaíso, Andes, Ciudad Bolívar, Salgar, Frontino, Guatapé y Marinilla. “Este deporte no da plata, pero si oportunidades, estudio por ejemplo y la posibilidad de salir”, dice Santiago y es cierto, José lo está experimentando con el equipo de Inder Envigado, viviendo estas nuevas experiencias, y ha obtenido regalos que no se imaginaba: uniforme de presentación, uniforme para jugar, un par de tenis nuevos y hasta rodilleras.
A pesar de su timidez, que es evidente mientras responde las preguntas de la entrevista, es un jugador con grandes capacidades en la cancha, él les gana a los nervios en los encuentros: “Creo que soy ágil y tengo fuerza”, dice José y lo ratifica Santiago comentando que, aunque no tuvo mucho tiempo de entrenar antes de que iniciaran las competencias, se acopló muy bien a las condiciones de la cancha y el balón: “es un jugador apasionado, en los partidos siempre está atento, es muy piloso. Todo el esfuerzo y el trabajo que ha hecho desde Támesis le han dado resultado”.