Mariana y Diego, pareja de hermanos que batean de hit

20 enero, 2016

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Por Viviana Betancur Quintero

La ciudad de México es reconocida por su riqueza cultural, gastronomía, su música de mariachi y que ha sido sede de dos Copas del Mundo (1970 y 1986). Los ‘manitos’ visitan el 7° Festival de Babybéisbol Edatel con su delegación Liga Olmeca, compuesta por padres de familia, entrenadores y jugadores.

Mariana y Diego Rodríguez Alegría, son hermanos y practican béisbol hace 9 años aproximadamente. Ella como receptora y él como bateador hacen parte del mismo equipo donde han crecido y obtenido grandes logros. Para Mariana, una deportista que se destaca en la novena por sus múltiples habilidades, el béisbol llegó sin buscarlo. Con frecuencia acompañaba a su padre a entrenar fútbol. Para llegar al campo de entrenamiento debía pasar por la liga de béisbol, hacia donde siempre observaba detenidamente con curiosidad; uno de esos días la invitaron a jugar y desde ese momento no ha salido de la cancha.

Su hermano Diego siguió sus mismos pasos y ahora se destaca por la fuerza con el bate y el trabajo bajo presión. “Desde la primera temporada en la que participaron, ambos fueron seleccionados para torneos. De Mariana recuerdo mucho que aguantaba pelotazos y no lloraba. Diego fue pionero en ganar el torneo de la división de Pañalitos. Siempre los apoyamos para que sean los mejores”, menciona Mary Alegría, madre de los deportistas y quien sabe mucho de esta disciplina pues durante algún tiempo fue entrenadora del equipo.

Mariana fue Bicampeona Nacional de Softbol el año pasado, deporte que también practica hace tres años. Diego ocupó el segundo puesto en bateo en el ámbito nacional de su categoría. Ambos admiran al beisbolista Adrián González, apodado el “Titán”, un jugador México-estadounidense de primera base con los Dodgers de Los Angeles.

Diego con su acento mexicano y rodeado de sus compañeros de equipo, comenta que uno de los momentos que más recuerda fue cuando hizo su primer jonrón: “ese día nunca lo voy a olvidar”. Sus padres los acompañan a donde vayan, y en este caso, será la ciudad de la eterna primavera en donde Mary Alegría le haga honor a su apellido y celebre su cumpleaños acompañada con las victorias de la novena mexicana.