Paula quiere ser la profe que siempre quiso tener

18 enero, 2024

Para ella, los resultados vienen y van, pero la amabilidad y respeto es lo que siempre queda en el recuerdo.

Foto: Wilson Valencia

Por: Sara Gil Martínez

Durante el torneo Babyfútbol Sala Mercados y Carnes OR, la profe Paula Andrea Botero jamás se exaltó, no dijo una mala palabra, no se enojó ni gritó. Ella desde la raya siempre animaba a sus niñas, les llamaba por su nombre diminutivo e incluso apodos llenos ternura y respeto.

Hoy tiene presente su primera entrevista a los 9 años, cuando apenas comenzaba en el fútbol once, pero con una sonrisa recuerda que siempre decía lo mismo: “Me llamo Paula Andrea Botero y he jugado fútbol toda mi vida”. Hoy Paula ya no juega competitivamente, pero es entrenadora, trabaja con Inder Medellín, en Comfama con procesos formativos y en la Universidad Eafit.

El lema de vida de Paula es que quiere ser la profe que siempre quiso tener y por eso le gusta llamarlas con ternura, animarlas durante el partido, enseñarlas a ser respetuosas y ordenadas, respetar el rival y a tratar a todos por igual. Afirmó que los resultados vienen y van, pero que esa amabilidad y ese respeto es el que la gente siempre se lleva como recuerdo.

El fútbol sala, fútbol once y fútbol de salón le han permitido recorrer el mundo. Jugando en equipos brasileños, españoles e incluso siendo campeona paranaense, Paula quiere hacer de sus niñas unas excelentes deportistas y mujeres. Además de dirigir al equipo Inder Medellín en Babyfútbol Sala, también es entrenadora de departamentales sub-21, y con ellas realiza un proceso más complejo pues la carga laboral y el estrés del mundo les puede jugar una mala pasada. Es por eso, que no solo les brinda sus mejores conocimientos técnicos, sino que fomenta espacios de esparcimiento y diversión que las pueda relajar y escaparse un rato del trajín del mundo.  

En el Babyfútbol Sala 2024, el Inder Medellín llegó a las semifinales y aunque se debió enfrentar a la derrota a una sola fecha de la final, Paula fue esa voz de amiga y entrenadora que les explicó que perder, ganar o empatar hace parte del deporte, pero lo que siempre tiene que estar, es el aprendizaje que se pueda obtener de todas las situaciones de la vida. Es por eso por lo que con la cabeza en alto y de la mano de la profe, los sueños de Inder Medellín femenino aún comienzan.