Autor: Luisa Fernanda Cataño
Fotógrafo: Andrés Ángel
Hay muchas cosas particulares en él. Daniel Mideros Ospina es el entrenador del equipo de judo que vino a participar y hacer historia en el primer Festival de Judo realizado por la Corporación Deportiva Los Paisitas, con los chicos a los que dirige. Toda esta delegación que entrena hace 3 años viene desde Manizales.
La primera participación que tuvo su equipo fue en categoría sub 12, a eso de las 10:30 de la mañana del pasado miércoles 17 de enero. Daniel, se acercó con su pupilo al tatami (piso) y, antes de comenzar la competencia, entre ellos dos hubo un saludo que combinaba choque de espalda, brazos y manos. Eso, el saludo y su cabello con rastas, fueron lo particular, y el amor y entrega que demuestra a cada uno de los niños.
Daniel recuerda cómo fue que él obtuvo su primer saludo y de ahí cómo cada uno de los judocas: “Estaba en Palestina y un deportista me dijo: Sensei quiero tener un saludo con usted, y yo me quedé pensando en cuál saludo y pues al otro día llegó con un saludo especial conmigo. Entonces yo comencé a implementarlo con mis alumnos. Hice el saludo con uno y los otros vieron y también me pedían cada uno su saludo”.
Lo más curioso, como dice él, es que puede recordar los 35 saludos que tiene con los niños, pero algunas veces no recuerda dónde dejó su teléfono móvil o la billetera. Además “yo noté que a ellos los motivaba mucho tener un saludo particular, que se pudieran diferenciar por eso. Tienen sentido de pertenencia y una conexión con el maestro”
Pero a cambio de un saludo, lo que más le interesa a Daniel es que todas las personas que ven y practican el judo entiendan que “más que pensar que tenemos un oponente o un enemigo, tenemos claro es que somos amigos todos, que somos un equipo disfrutando el mismo deporte”.