Por: Juliana Sosa Góngora
“Le gusta aprender las acrobacias, dice que va a hacer todas las vueltas como los grandes y a mis amigos les pide que le enseñen. Este muchacho es demasiado popular, le encanta que lo miren, que lo aplaudan, que le tomen fotos y estar en escena”… Así describe Angélica Ríos a Dylan Cano.
A madre e hijo los une la pasión y la compartirán en el Festival de Babyporrismo, en el que ella será instructora y él participante con el Club Medellín All Stars. El pequeño llama la atención por donde pasa por su tamaño, el orgullo con el que porta el uniforme y el entusiasmo que nunca le falta.
“Siempre me acompañaba a los entrenamientos y hacía cositas, jugaba con mis compañeros y cuando yo presentaba mis equipos me preguntaba: ‘Mamá, ¿cuándo voy a salir con ellos y contigo?’, entonces creé el grupo de bebés. Dylan es un enamorado del porrismo, es el que guía a los demás, los motiva y hasta los regaña”, afirma Angélica.
El deporte que la cautivó y por el que dejó la gimnasia es en el que brilla su chiquito de 5 años, desde los 2. “Dylan es muy gomoso. Si yo estoy viendo un video, también se pone a mirar y a practicar. Como mamá siempre quiero que esté bien y a él le gusta la energía que le da todo el mundo. Eso me hace sentir muy feliz”, concluye.