Valery: una artista que conquistó la esgrima

16 enero, 2024

Deportista, música y futura ingeniera automotriz: así se desarrolla la vida de la pequeña mosquetera.

Foto: Paula García

Por: Sara Gil Martínez

Valery es esgrimista, está en la orquesta del colegio, tiene una banda y toca el piano. Con tan solo 12 años se sueña diseñando sus propios automóviles y disfrutando del deporte de la espada toda su vida.

La historia y las películas sobre los periodos de colonia y conquista fueron las que enamoraron a Valery Grisales de la esgrima. Un deporte que nadie en su familia practica; sin embargo, la forma de las espadas, la idea de defenderse y atacar la cautivaron y en el 2021 decidió entrar a la Liga Antioqueña de Esgrima.

Aunque afirma que no es una disciplina sencilla, se siente muy agradecida por la paciencia que sus formadores le tuvieron cuando estaba aprendiendo todas las tácticas y poses para competir en torneos nacionales. Inicialmente entrenaba con niños más pequeños por lo que los conceptos técnicos no eran tan recurrentes, pero a medida que fue creciendo su curiosidad por conocer cada rincón de la esgrima la dominó y ahora es toda una experta en la modalidad de Espada.

Gracias al deporte, Valery Grisales ha podido viajar a Bogotá, Cali, Buga, Rionegro e incluso a Montevideo, a los Juegos Panamericanos. Su madre y sus abuelos siempre están con ella animándola, aún sin entender propiamente la disciplina, pues lo que más les interesa es verla feliz mientras lucha con la espada en la pista de esgrima. Hoy Valery tiene más de 10 medallas de primer lugar y otras más de segundos y terceros puestos.

Esta campeona no solo es esgrimista: también hace parte de la orquesta del colegio Waldorf Isolda Echavarría, donde toca para las obras de teatro y eventos institucionales. Se siente orgullosa de haber interpretado las piezas del Circo del Sol junto con sus compañeras de orquesta. En los días libres también tiene una banda de pop y rock llamada “Tilapias” y aunque no es la fan número uno del nombre de la banda, disfruta de cantar con sus amigos y tocar el piano.

Valery aspira poder siempre practicar la música y la esgrima, aunque su sueño es ser ingeniera automotriz y diseñar sus propios automóviles. Ella dice que siempre es la que se sabe todas las marcas de los autos e incluso conceptos técnicos de mecánica, un legado que su papá y su abuelo le han dejado.