La novena venezolana de Inder Medellín

18 enero, 2019


Por: Luisa María Gallo G.
Fotografía por: Andrés Ángel

Al equipo de Inder Medellín llegó una cuota venezolana de 10 niños que han aportado con el conocimiento que tiene el país vecino en el deporte de la ‘pelota caliente’. Según su manager Jonathan Ojeda, la presencia de los chicos ha favorecido la creación de un ambiente de camaradería en el grupo, compartiendo costumbres y aceptando el nuevo espacio de entrenamiento como una familia.

Juan Carlos Maestre, con 13 años, decide hablar de primero al ver que los demás entre risas dudan si hablar o no sobre su vida. Cuenta que llegó a la ciudad hace 2 años a vivir con su abuela y más tarde buscaron un campo de béisbol, encontrando el diamante Luis Alberto Villegas que le permitió volver a entrenar el deporte que disfruta desde los nueve años.

Su historia se repite con los demás: Michael Adalberto Infante, ‘la hormiguita atómica’, llegó hace 6 meses a Medellín y hace 3 meses inició sus entrenamientos de béisbol. Aarón Osorio, lleva 3 años en el país y desde hace 2 está practicando en el diamante paisa. Santiago Sánchez con apenas 6 meses en tierra colombiana, lleva 4 practicando béisbol en la ciudad. Antonio Navarro lleva 1 año y entrena hace 4 meses.

La historia de Alejandro Marcano difiere en que primero llegó a Bogotá y allá encontró un club con el que participó en la novena edición del Baby Béisbol. Marcelo Carvajal entrena con el equipo hace seis meses, la mitad de lo que lleva adaptándose a las costumbres colombianas. Jesús Reinefeld un mes después de salir de Venezuela encontró el campo de béisbol que recibe a las 12 novenas que participan de esta edición del Baby Béisbol, ajustando ya tres meses.

Los que más tiempo llevan entrenando bajo los 22°C promedio de la capital antioqueña, temperatura menor a la de su país, son: Misael Echeto que llegó hace 3 años a Colombia y lleva la mitad del tiempo entrenando en la Unidad Deportiva Atanasio Girardot y Jesús Manuel Altamiranda, quien completa cuatro años.

La mayoría de ellos conocían las bases del deporte en Venezuela, donde es una de las prácticas deportivas con mayor popularidad, tienen el talento y son suficientes para formar la novena.