Por: Luisa Alzate
Con el equipo de Envigado, categoría Benjamín, llegó al Festival de Festivales un pequeño de 8 años de edad llamado Samuel Cano Mazo, al que dos días antes de la inauguración del certamen, le confirmaron su participación.
Su llegada no fue fácil. Samuel no cumplía con la edad requerida para inscribirse en la categoría y además, su equipo, no tenía los 4 jugadores mínimos para competir. Y aunque todo parecía indicar que no iba ser posible, ahora Samuel es uno de los 535 deportistas que viven las emociones del Festival de Voleibol en su versión número 11.
Destino o casualidad, Cristian Camilo Mazo, el papá de Samuel que es además entrenador de Los Potros, otro equipo en competencia; dice que la alegría que siente al ver a su hijo en juego no puede compararla con algo ya vivido, pues él también fue jugador activo en este deporte .
Además, Cristián Camilo cuenta que la llegada de Samuel al voleibol tampoco fue fácil, porque él creía que no era un deporte que jugaban los niños y mucho tiempo después decidió acompañarlo a un entrenamiento y “ahí se quedó, para mi satisfacción”, cita.
Por lo pronto, Samuel seguirá aprendiendo los gajes del deporte y divirtiéndose con sus compañeritos, mientras Cristián Camilo, cada que pueda, le seguirá gritando desde afuera de las canchas “¡así es…así es como se juega, papá!”.