Autor: Alejandro Rave
Fotógrafo: Andrés Ángel
Habilidad y destreza son habilidades que se requieren en el porrismo, además de una muy buena coordinación, la cual se hace más fácil cuando conoces bien a tus compañeros de equipo y si esa persona convive contigo, la ves todos los días y comparten la misma sangre, de seguro fluyen mejor los movimientos, como lo demuestran Sara y Santiago Pinzón Álvarez, participantes del cuarto Festival de Porrismo.
Santiago y Sara tienen 11 y 10 años, respectivamente, hace seis que viven en Medellín en donde descubrieron la pasión por este deporte. “Yo disfruto mucho del porrismo por la adrenalina en los saltos, las coreografías y la emoción de las competencias” afirma Santiago, quien también juega fútbol como arquero en el club Alexis García.
Sara disfruta mucho de la emoción que le produce estar en el aire, por eso al igual que en las acrobacias del porrismo ella también practica clavados: “lo que más me gusta de practicar los dos deportes es sentir ese vacío en el estómago, para mí es lo mejor y me hace sentir muy bien” comenta Sara, quien en un futuro quisiera seguir practicando esta actividad pero formada como una bióloga marina.
Karen y Jaime son los papás de este par de deportistas. Para ellos no hay un momento que los llene más de alegría y orgullo que ver a sus hijos participando en este tipo de competencias: “de nuestra parte siempre tienen nuestro apoyo, vamos a verlos siempre que se presentan en alguna parte y para mí es muy satisfactorio verlos compartir como hermanos, se entienden muy bien y a pesar de que también discuten, el deporte siempre los tiene cerca y compartiendo grandes momentos” agrega Karen Álvarez que sueña con ver a alguno de sus hijos ganando una medalla en unos Juegos Olímpicos.